Los niños que tienen insomnio infantil, tiene dificultades para dormirse, tienen un sueño poco profundo con frecuentes despertares nocturnos y, en general, duermen menos de lo que sería recomendable. Los trastornos del sueño, pueden estar relacionados con hábitos inadecuados que deben ser corregidos para restablecer el equilibrio o pueden ser secundarios a otro tipo de problemas.
